Un libro abierto sobre la Historia escrita en el paisaje

El Cabildo abre con el Centro de Interpretación de Degollada de Becerra una nueva ventana para asomarse a los tesoros del Patrimonio Mundial y la Reserva de la Biosfera de Gran Canaria 

Por Sofía Betancort.

 “Del mismo modo que una casa familiar no es solo un conjunto de muros y habitáculos, sino un hogar, este espacio supone mucho más que una infraestructura”, afirmó el presidente del Cabildo, Antonio Morales, en la inauguración del Centro de Interpretación de Degollada de Becerra. El recinto se abre como un libro para leer el territorio y brindar una visión detallada sobre la historia, la geología y la evolución de un paisaje modelado tanto por la actividad volcánica como por la presencia y adaptación humana a lo largo del tiempo.

Este espacio convierte la visita en una experiencia de descubrimiento, aprendizaje y reflexión, inspirando además nuevas formas de entender y proteger el entorno a partir de los valores de la Reserva de la Biosfera y el Patrimonio Mundial del Paisaje Cultural de Risco Caído y las Montañas Sagradas de Gran Canaria. La primera de estas figuras UNESCO cumple este año su vigésimo aniversario, mientras que la segunda fue designada en 2019. Ambas coinciden y conviven ampliamente sobre el territorio.  

La adaptación del inmueble por parte del Cabildo con una inversión de 1.038.944,20 euros con cargo a los fondos captados del Plan de Sostenibilidad Turística mejora la infraestructura, optimiza los servicios interpretativos y expande las actividades sociales y educativas. Además, ha sido transformado en un alojamiento temporal para la comunidad investigadora, escolares, senderistas y otros colectivos, además de contar con mirador astronómico, cafetería y espacio multifuncional.

A través de la coordinación de iniciativas de investigación y monitoreo, el centro contribuirá a la protección de los frágiles ecosistemas y restos arqueológicos de la Cuenca de Tejeda. Su labor promoverá una gestión responsable del patrimonio, garantizando la preservación de su biodiversidad y riqueza cultural para las futuras generaciones, pues nace con la voluntad de vincularse estrechamente con la comunidad local, fomentando la colaboración con la población residente, comunidad investigadora, entidades sociales y culturales y demás agentes. 

La principal innovación de este centro radica en la apertura de un albergue diseñado especialmente para escolares, senderistas, científicos y grupos de interés. Este espacio brindará la oportunidad de observar las estrellas, pernoctar en un entorno natural rodeado de caminos y participar en diversas actividades educativas. Además, se está desarrollando una plataforma digital que facilitará a los usuarios la gestión de reservas en línea, optimizando el acceso y la organización de las estancias.

A través de videos, paneles informativos y modelos táctiles, el público podrá sumergirse en la historia geológica de la isla, comprendiendo cómo sus formaciones naturales han influido en la vida y las costumbres de sus habitantes. Así, en el espacio se ponen de manifiesto las formas de vida tradicionales, mostrando cómo las antiguas poblaciones supieron aprovechar los recursos naturales del entorno para desarrollar una cultura única, cuyas costumbres y saberes han perdurado hasta la actualidad.

Otro de los atractivos del centro es su mirador astronómico, que complementa la experiencia ofreciendo una ventana privilegiada hacia el cielo nocturno. Además, se fomentará la puesta en valor del trabajo de artesanos, agricultores y pequeños negocios locales, asegurando que los beneficios económicos del visitante sean compartidos con la comunidad. La propia actividad del centro a través de su implicación en los consejos de participación ciudadana de Gran Canaria, integrará las perspectivas locales en sus programas y políticas.

Incorpora iluminación exterior con baja contaminación lumínica, un sistema de depuración natural de aguas residuales y se han colocado instalaciones de energías renovables y conexión a internet. También garantiza la accesibilidad universal con señalética inclusiva y mobiliario flexible, pues todo el diseño ha sido planificado teniendo en consideración el compromiso con la accesibilidad, la inclusión y la sostenibilidad. 

Está estratégicamente ubicado en la frontera entre los municipios de Vega de San Mateo y Tejeda, en el corazón de Gran Canaria. Este enclave ofrece una de las vistas panorámicas más espectaculares de la isla, permitiendo contemplar su geografía única, marcada por impresionantes formaciones naturales. Entre ellas destacan el Roque Nublo y el Roque Bentayga, dos majestuosos monolitos de origen volcánico que han sido testigos de la evolución geológica y cultural de la isla a lo largo de milenios.

Desde este mirador, los visitantes pueden apreciar la inmensidad de la cuenca de Tejeda, una depresión geológica que revela el efecto de miles de años de erosión sobre la antigua estructura volcánica que dio origen a la isla. Asimismo, la vista se extiende a los profundos barrancos que surcan el territorio, conformando un paisaje espectacular esculpido por la naturaleza.

PRESENTE EN LA BIENAL DE ARQUITECTURA DE VENECIA

Gran Canaria está presente en la XIX Bienal de Arquitectura y Arte Contemporáneo de Venecia, la cita más importante del mundo de su clase, con la exposición del Centro de Interpretación del Paisaje Cultural de Risco Caído y las Montañas Sagradas, en Artenara, y el recientemente inaugurado Centro de Visitantes de Degollada de Becerra, ambos pertenecientes al Cabildo, en el marco de la muestra ‘Deep Surfaces: Arquitectura polifuncional para mejorar la experiencia en los sitios designados por la UNESCO’. La muestra “subraya ante la mirada de decenas de miles de visitantes hasta el próximo 23 de noviembre el papel que cumplen ambos centros en la divulgación e interpretación del Patrimonio Mundial y la Reserva de la Biosfera”, según explica el consejero de Presidencia del Cabildo, Teodoro Sosa.  Asimismo, recalca que es una muestra más de la creciente repercusión nacional e internacional que se está tejiendo a través de la labor del Instituto para la Gestión Integrada del Patrimonio Mundial y la Reserva de la Biosfera de Gran Canaria, junto a la creación de redes de colaboración, hecho que también quedó patente con su inclusión en la junta directiva de la Alianza de Paisajes Culturales y Sitios Afines.