Un cierre de altura para la pasarela nupcial de Gran Canaria
El pasado viernes 18 de julio de 2025, el emblemático Hotel Santa Catalina –
Royal Hideaway acogió el cierre de la 11ª edición de la pasarela Bridal
Collection, organizada por el Cabildo de Gran Canaria dentro del programa
Gran Canaria Moda Cálida. El broche de oro lo puso la diseñadora Aurelia Gil,
que presentó su esperada colección nupcial “Mi Suerte”, un homenaje íntimo a
su trayectoria y al trabajo artesanal que define su firma desde hace más de dos
décadas.
Una propuesta profundamente emocional y artesanal
La colección “Mi Suerte” fue concebida como una declaración de gratitud y
celebración: 22 años de oficio, creación constante y trabajo en equipo. Gil
quiso rendir tributo a esa parte del diseño a medida que muchas veces
permanece oculta, que no siempre se comparte pero que constituye el corazón
de su atelier. “Mi suerte es mucha”, escribió entonces la diseñadora, “y quiero
compartirla”.
Durante el desfile, 27 estilismos nupciales desfilaron por la pasarela del
histórico hotel, revelando una estética exquisita y cohesionada. Los vestidos,
confeccionados en tejidos nobles como organza bordada, encajes delicados,
tules y tweeds suaves, ofrecieron una lectura romántica, afrancesada y
contemporánea de la novia. Cada diseño transmitía una historia propia,
combinando cortes clásicos con detalles sorprendentes, como sobrefaldas
desmontables, transparencias sutiles o escotes estructurados.
El aire nostálgico y elegante se vio reforzado por los accesorios de la artista
Marisa Velázquez (@byloleriro), que aportaron guiños al legado de Coco
Chanel, figura referencial en el universo creativo de Aurelia Gil. Juntas,
diseñadora y joyera, articularon una imagen de la novia sofisticada, libre y
consciente.
La escenografía: un espacio expandido para una experiencia envolvente
La pasarela, rediseñada especialmente para esta edición, ocupó varios
espacios del hotel, desde el Patio Tortugas hasta el salón Miguel Martín-
Fernández de la Torre, creando un recorrido dinámico y escenográfico. Telas
suspendidas desde el techo, sillas de mimbre, vegetación y luz cálida dieron
forma a una atmósfera íntima, natural y evocadora.
Uno de los elementos más destacados fue la apertura del backstage, ubicado
en el Salón Arencibia, que se transformó en un escaparate de lo que ocurre
detrás del telón. Allí, los asistentes pudieron contemplar parte del proceso de
vestuario y maquillaje, generando una conexión más directa entre el público y
el universo creativo de cada firma.
Un manifiesto de valores: sostenibilidad, artesanía y diseño a medida
Fiel a sus principios, Aurelia Gil reafirmó con esta colección su apuesta por un
diseño consciente y emocional. Cada prenda fue elaborada en su atelier de Las
Palmas de Gran Canaria, con el apoyo de un equipo de mujeres que dan vida a
sus bocetos, ideas y caprichos. El desfile no solo fue un escaparate de moda,
sino también un reconocimiento al trabajo colectivo que sustenta su firma.
“Mi Suerte” también puso de relieve una visión de la novia moderna que busca
conexión, identidad y autenticidad. Una novia que prioriza el diseño a medida,
que valora la sostenibilidad y que entiende el vestido no como un producto de
consumo efímero, sino como una pieza de legado.
A nivel técnico, la colección destacó por su versatilidad, apostando por
modelos adaptables y combinables. Algunas piezas incorporaban opciones
modulares, permitiendo a la novia jugar con siluetas y acabados. Esta
propuesta no solo responde a nuevas sensibilidades estéticas, sino también a
una conciencia económica y funcional que Gil ya ha defendido en anteriores
colecciones.
Un cierre que confirmó la madurez de la pasarela
El desfile de Aurelia Gil fue el colofón perfecto para una edición que consolidó a
Bridal Collection como un referente en el circuito nacional de moda nupcial. La
pasarela, que combinó marcas consolidadas con diseñadores emergentes y
propuestas internacionales, logró reunir en dos días a prensa especializada,
compradores, clientas y representantes institucionales, todo en un marco de
diálogo entre tradición e innovación.
La colección de Aurelia Gil brilló no solo por su calidad estética, sino también
por su carga emocional, su coherencia discursiva y su fidelidad a un modelo de
moda responsable, local y profundamente humano.
Una diseñadora que sigue marcando el pulso de la moda canaria
Licenciada en Bellas Artes y especializada en Diseño de Moda, Aurelia Gil lleva
más de 20 años liderando su firma de prêt-à-porter y novias desde Gran
Canaria. Su atelier, ubicado en el corazón de Las Palmas, es un espacio donde
conviven la creatividad, el trabajo manual y la atención personalizada.
“Mi Suerte” no fue solo una colección. Fue una carta de amor a su trayectoria, a
su equipo, a su tierra y al arte del oficio. Una celebración sincera de lo que
significa vestir a una mujer para uno de los días más significativos de su vida.
El desfile del pasado julio fue la prueba de que la moda, cuando se hace con
sentido y con alma, trasciende la pasarela.