Yotuel “Más Orishas que nunca”

Yotuel Romero es uno de los artistas más reconocidos de nuestro país. Cantante, compositor, actor y líder del grupo Orishas, ha convertido su expresión artística en un compromiso. Asegura que no compone melodías para complacer, sino para despertar conciencias. Y es que este cubano de origen y corazón, ha encontrado en la música un refugio a la magua que le produce sentir Cuba en la distancia.

Con sus letras reivindica y sueña con una tierra más próspera para su gente, y en Canarias dice haber encontrado un segundo hogar, una segunda isla que le acoge y le proporciona sabor de hogar. Llegó por primera vez a España en el año 2000 con un estilo musical que hoy, 25 años después, arrasa en las listas musicales y es toda una referencia a nivel mundial.

Su salto a la serie televisiva “Un paso Adelante”, a comienzos del nuevo milenio, fue un acicate para convertirlo en un ídolo de masas en España. Al compás televisivo también conoció a su gran amor, la actriz y cantante, Beatriz Luengo. Más de 20 años después ha demostrado que su éxito se sustenta en grandes dosis de talento y una mochila cargada de sacrificio, compromiso y perseverancia.

Con varios Grammys a sus espaldas y la composición de símbolos musicales como ´Madre Tierra´ o ´La Mordidita´, el año 2025 ha supuesto el regreso a la escena mundial con el legendario grupo Orishas.

¿Recuerdas cómo llegó el arte a tu vida y diste esos primeros pasos artísticos?

Desde chamo, el arte fue mi manera de respirar. En La Habana, entre apagones y resistencia, encontré en el rap una forma de libertad. Empecé rimando en las esquinas, soñando con un micrófono y una tarima. A día de hoy puedo decir que el arte me salvó.


¿Qué te trajo hasta España?

El destino. Vine con Orishas buscando romper fronteras. España fue la primera puerta que se abrió a nuestra música y yo entré con el alma abierta. Aquí encontré familia, libertad y a Beatriz, el amor de mi vida.


¿Cuándo y cómo nace Orishas?

Orishas nace en París, pero con el corazón en La Habana. Éramos jóvenes con hambre de contar nuestra verdad. Mezclamos hip-hop con raíces cubanas y nació una revolución musical. Fue un grito de identidad.


¿Qué supuso el salto a la televisión con Un Paso Adelante?

Una experiencia hermosa. Me permitió mostrar otra faceta artística y conectar con un público distinto. Pero sobre todo, me dio una plataforma para representar a Cuba desde otro lugar. En cada aventura profesional que llega a mi vida, siento que se abre una ventana, una oportunidad para poner en valor mis raíces.

Has cosechado el éxito en primera persona, pero también tras la composición de importantísimos hits como ´Madre Tierra´ o ´La Mordidita´. ¿Cómo se saborea ese éxito como compositor?

Los éxitos como compositor me proporcionan otro tipo de alegría. Satisface ver a otros brillar con palabras que tú creaste. Es saber que tu arte puede conectar sin necesidad de estar delante. Y eso, para mí, también es magia.


Te hemos escuchado decir que “los artistas deben hablar por el pueblo”. ¿Qué implica este compromiso?

Implica coraje. Implica ponerte la piel del pueblo y gritar lo que otros no pueden. Significa incomodar al poder y abrazar la verdad, aunque duela. Yo no hago música para complacer, hago música para despertar.

En Canarias lo llamamos ´magua´ ¿Duele ver a tu Cuba amada en la distancia? ¿Cómo manejas la frustración al ver la involución de tu tierra?

Duele como un cuchillo. La magua me acompaña cada día pero, la convierto en canción, en lucha, en arte, pero no me resigno. Mientras haya voz, habrá pelea por una Cuba libre.

Ganador de dos Latin Grammy por el tema Patria y Vida. ¿Cómo nace este trabajo y qué supuso compartirlo con el presidente de EE.UU.?

Patria y Vida nació del dolor, de la rabia, de la esperanza. Es el himno de una generación cansada de callar. Compartirlo con el president de los Estados Unidos, Joe Biden, fue histórico; pero más grande fue compartirlo con mi pueblo, en la calle, gritando libertad.

¿En algún momento, ese compromiso con tu pueblo cubano ha supuesto un obstáculo para tu carrera artística?

Sí, muchas veces. Me han cerrado puertas, me han vetado. Pero yo no cambio mi voz por ningún premio. Prefiero dormir en paz que vivir de rodillas. El arte sin verdad es solo entretenimiento.


¿Cómo es la vida A lo canario?

Es sol, familia, gofio y abrazo sincero. Canarias me dio refugio y cariño cuando más lo necesitaba. Aquí me siento en casa. Es mi segunda isla.


¿Cómo estás viviendo la vuelta de ORISHAS a los escenarios?

Con el corazón en llamas. Volver con Orishas es reencontrarme con mi esencia, con el público, con la historia. Pero esta vez más maduros, más conscientes, más Orishas que nunca.


¿Un sueño?

Una Cuba libre. Sin miedo. Con sus hijos dentro y fuera abrazándose en la calle. Ese es mi sueño. Y por eso sigo cantando.